Es una forma de Radioterapia sumamente precisa, ambulatoria, no invasiva, sin transfusiones de sangre, sin incisión quirúrgica y con minimización de riesgos para la que se usa el Acelerador Lineal.
En comparación con la Radioterapia tradicional, la Radiocirugía entrega radiación enfocada en dosis mucho más altas y en solamente uno o muy pocos tratamientos.